LA IDIOTEZ EN SU ESPLENDOR: Creo que es algo que titularía él: El autor de “Las leyes de la estupidez humana" en, su libro "Tres historias extravagantes" cuenta entre otras la historia de los "luises" de plata. Como nos lo diría Carlo María Cipolla historiador económico italiano:“Allá por el 1656 se convirtió en moda entre las mujeres de Turquía, adornarse con collares, pulseras… creadas con luises franceses. El aumento tan desproporcionado de la demanda de la esta moneda hizo que alcanzara en poco tiempo un valor muy superior del que realmente le correspondía.
Al tratarse de una moneda de curso legal, el hecho produjo el primero de los desajustes (ya que los comerciantes franceses obtenían un sobrevalor por las monedas en Turquina) en el propio sistema bancario francés, que este no le era posible soportar. El segundo efecto fue la aparición del especulador, (los avaros y demás personajes sin escrúpulos) quienes con sus ansias de hacer fortuna lo más rápido posible, comenzaron a fabricar monda en grandes cantidades, pero rebajando la parte de plata y de cobre en la aleación correspondiente.
De nada sirvieron ciertas recomendaciones de algunos funcionarios, que pidieron que no se hiciera la vista gorda en el tema. Puesto que crear la desconfianza en la moneda no traería nada bueno… Pero la codicia ya estaba en marcha y no se detendría, lo importante obtener grandes beneficios a costa de lo que fuera.
Transcurrido el periodo o ciclo del chollo, el tamaño del fraude era tan grande que comenzaron a florecer sus efectos perniciosos, los ingleses comenzaron a ver cómo eran perjudicados al tener una balanza comercial favorable con los turcos, estos cobraban en luises de baja calidad. Por lo que estos protestaron a los turcos y estos a los franceses…
El autor “Cipolla” nos puntualiza: “Tenemos que admitir que algunos astutos funcionarios turcos sabían del timo… Pero bien por ineficiencia, o por corrupción e implicaciones diversas en el trafico de las monedas, no habían tomado las medidas necesarias para evitar, el problema”.
Como vemos una y otra vez se sigue repitiendo la historia, podemos comprobar cómo quien pago el pato fue la economía turca, que es lo mismo que decir el pueblo, el señor de a pie. Que se despertó con montones de monedas falsas. Y es que no aprendemos de las lecciones de la historia…
Y es que me sigue llamando poderosamente la atención el grado de estupidez e ingenuidad del ser humano.
No hace mucho todos los medios se hacían eco del Sistema “Ponzi”, como si fuera algo novedoso, algo que nadie se había percatado de que esto sucedía, cuando ya el señor Hyman Minsky nos explicó en su día, la manera en que los ciclos financieros terminan en un esquema Ponzi.
(“El aumento del crédito, según Minsky, lleva inexorablemente al aumento de la tasa de interés, que finalmente se sitúa por encima de la tasa de beneficio. En un contexto de tipos de interés alto, las empresas cubiertas podrán afrontar sus pagos, pero las empresas especulativas y Ponzi verán que los beneficios no cubren la deuda contraída. En ese momento se produce una contracción del crédito (o credit crunch), pues el sector prestamista deberá ampliar sus márgenes de seguridad”).
De repente aparece el paganini de turno, como el caso de un Julián Muñoz en su día o como es el caso más importante y relevante del momento, el de Bernie Madoff ocupando las noticias durante meses, tanto en prensa escrita como televisiva y más… Cuando lo que el señorito Madoff llevo a cabo más o menos es lo que el conjunto de la economía viene haciendo desde siempre, incrementar su riqueza a costa de gilipollas. Eso sí, todos ahora sabemos el funcionamiento de un esquema Ponzi.
Cuando apenas un par de años antes, en nuestro país salto a la palestra el caso de Afinsa Bienes Tangibles S.A., el mayor comerciante de sellos del mundo, y de su competidor, el Fórum Filatélico. Todo un esquema piramidal que pillaba a 340.000 inversores y representado uno de los mayores fraudes de la historia de española.
No es necesario pasar por la universidad ni ser ninguna lumbrera en economía para saber que cuando los inversores se retiran de la formación de capital tangible y entran a comprar sellos postales u otros objetos coleccionables similares, es que la economía está en graves dificultades, o que ha perdido el sentido de la realidad. Los sellos a diferencia de la maquinaria no producen bienes y servicios reales. Sin embargo los sellos se convirtieron a los ojos de los ahorradores, en un vehículo para ganar dinero.
“Dada la codicia y la irracionalidad que ha caracterizado a Wall Street en los últimos veinte años, muy poca gente se preocupó seriamente de cómo, aún en tiempos de una profunda crisis, el fondo de Madoff continuaba siendo el más rentable de Estados Unidos. O hacían la vista gorda o lo atribuían a la genialidad de Madoff, quien además se daba el lujo de rechazar a un buen número de quienes querían invertir con él: otra de sus reglas de oro era rodearse y aceptar en su negocio sólo a gente muy rica y bien conectada. Barbara Fox, presidenta del Fox Residencial Group, quiso invertir con Madoff el dinero que ganó al vender en varios millones de dólares su departamento en Manhattan, pero fue rechazada. "Llegué a rogarle que aceptara mi dinero", contó la mujer a la prensa: "No sé bien por qué me rechazó, ahora pienso que tal vez quería protegerme de él mismo"… “Llegando incluso el personaje a ser uno de los principales consejeros del gobierno a la hora de estipular regulaciones para el sistema en Wall Street”.
Por lo que estoy totalmente convencido que esto sucede porque existe por un lado la gilipollez y por otro lado se hace la vista gorda.
