El cardiólogo, _con buen criterio_ me ha prohibido ver las noticias, dice que estas no me convienen, que puede darme otro “yuyú” y que de este ya no saldría. Así que me pide que me relaje y que solo lea tebeos (ya saben El Botones Sacarino, Mortadelo y Filemón, Rompetechos…) puesto que estos personajes son igual de carajotes, que los que llenan las pantallas, el espacio radioeléctrico y tantos kilómetros de papel. El problema es que uno es como es y según van pasando los años cada vez le es más difícil cambiar, por lo que sigo agarrado a mi curiosidad y desobediencia, desoyendo el consejo del médico. Ya saben ustedes el dicho: “La curiosidad mató al gato”. Y es, que hay cosas, que mejor no saber…
Hoy son tantas las cuestiones criticables que no se, ha cual dedicar mi entrada y no es porque sean originales e impredecibles, las noticias, no estás ya son añejas y cansinas, pero que siguen un patrón que da por el saco al pueblo, hasta que este no dé más de sí, ellos le llaman criterios o acuerdos y un sinfín de memeces que les sirvan para disimular tan grave e inmenso recorte de derechos y prestaciones como el que pretenden llevar a cabo. Este aún va a ser mayor que el de Grecia.
Y es que tengo que ver cómo tanto mentecato o listo que cree que el mentecato soy yo, que para justificar el hurto de derechos del ciudadano, va soltando barbaridades inimaginables, del tipo: “es que el gobierno es esclavo de los sindicatos”. Hay que ser imbécil, y además cobra como crítico y analista político, ¡ya tiene bemoles! Hombre por respeto a la libertad de expresión, yo no le pondría un bozal, pero le diría que por favor absténgase de decir majaderías. Porque la única relación existente entre sindicatos y gobierno es la de ser los primeros los besaculos del segundo. ¿Entonces quien es el preso? ¡Vocero!
Y qué decir del caso Garzón, esto sí es de escándalo mayúsculo, ¡señores! que el poder judicial ¿es independiente? ¿Quién lo nombra? Y claro cuando se toca la fibra sensible, salen a la luz las lagunas oscuras de la transición, de nuestro sistema constitucional y de nuestro proceso constituyente. Es decir que el caso Garzón, si algo esclarece es quien es quien, además de estar poniendo entre dicho los propios cimientos de la democracia española. Es decir hoy nada ha cambiado demasiado, seguimos comiéndonoslas todas y sin protestar, pues no cabe reclamación. Lo que ha hecho el poder que nos controla, es redactar unas normas que se suponen que defienden los derechos fundamentales de los españoles para legitimarse ellos, no nosotros, y a esto le ha llamado democracia y que “supuestamente” convierte al pueblo en dueño de su destino. Menuda farsa: ¿Cómo los millonetis, van a poner su futuro en mis manos? Precisamente en alguien que si gana 100 gasta 120, ¡No, no se extrañen! Es lo que hemos hechos los ciudadanos de más de medio mundo, ¿quién no debe al banco?
Lo cierto es que el régimen actual es opresor, como el anterior, como el anterior del anterior…, vamos que no somos más libres ahora que en tiempos pasados. Antes nos lavaban el cerebro desde los pulpitos, ahora desde los periódicos. El dictador un gallego, ahora los banqueros. Somos marionetas, en una sociedad falta de ética y decadente. Nos tienen contra las cuerdas, nosotros no tenemos nada ellos son los dueños de todo. Tienen un control absoluto sobre nosotros, (conocen nuestros gustos, nuestros pensamientos, los calzoncillos que ponemos…todo) por lo que anulan por completo cualquier intento de rebeldía. Y lo cojonudo es que logran hacer creer que somos nosotros los que tenemos el control. Nosotros no controlamos nada, de nada…
Y qué decir del ministro de trabajo. El señor 3Cs. este apologista de los fondos privados de pensiones. Como va este señor a defender los derechos de los trabajadores, cuando está pensando solo en rebajar las cotizaciones de los empresarios. De ahí que pida aumentar la edad de jubilación, o el aumento de los años cotizados, o el cálculo de base reguladora, tomando toda la vida laboral. Es decir todas las medidas que se le ocurren al ministro están abocadas a recortar derechos a los trabajadores. Su ministerio no es el trabajo, sino el de la CEOE.
En fin este capítulo lo dejare para mañana…
