domingo, 3 de octubre de 2010

¿Y ahora, qué?


Como bien ha señalado M. Colmeiro: “Poder es querer con eficacia. Donde no hay voluntad para concebir y fuerza para ejecutar, allí no existe poder de ninguna especie. La voluntad solo significa un pensamiento estéril o un deseo ineficaz”



Por lo que una vez pasado el 29S no hay nada nuevo, como era previsible. Surgiendo la correspondiente pregunta: ¿Y ahora qué?

Pues ahora, más de lo mismo: Ostias al mono… (La primera la subida de las tarifas eléctricas).

No creo que sea necesario una reflexión demasiado profunda para darse cuenta que haciendo más de lo mismo solo se obtiene el mismo resultado. Así pues, mis preocupaciones siguen siendo las mismas de antes “de” pero no solo al antes más próximo, sino que las mismas que tenían nuestros antepasados, siguen las mismas incertidumbres…respecto a la cuestión. ¿Cuál es el proyecto económico? Referente a: la población de España, agricultura, industria, comercio interior y exterior, infraestructura, fiscalidad, alivio de la pobreza (es decir erradicar la mendicidad y, no contribuir al constante aumento de esta), educación, corrupción,…

Porque, lo que veo, solo me lleva a tener presente la frase de Luis Vives: “Desterrada la justicia, que es vínculo de las sociedades humanas, muere también la libertad, que está unida a ella y vive por ella”. Y efectivamente, me pase toda una semana escuchando un ataque feroz contra el movimiento obrero. Que no es otra cosa que intentar matar la libertad. (Si bien es cierto que hay organizaciones que nada tienen que ver con este y que solo sirven para desprestigiar y neutralizarle). Resulta que nadie está de acuerdo _ni los empresarios_ con las medidas del Gobierno, en lugar de poner a este en un brete, ¡pues no! “realmente” más bien el Gobierno sale reforzado. Gracias al ejercicio cínico, que la oposición parlamentaria realizó, con semejante ejercicio de cinismo digno del mismísimo Josep Antoni Duran i Lleida. (Quién incluso en su papel de Pilatos resulta falso). Asisto al triste y patético teatro, eso sí. Se les ha visto a todos el plumero.

Una confirmación más de que, la clase política está subordinada a la derecha financiera. Que utiliza muy bien la alternancia de los partidos políticos favoreciendo o entorpeciendo su acceso y permanencia al frente del Estado según convenga, ahora “X” o ahora “Y”, lo únicamente que les importa es que sus bolsillos no resulten perjudicados. Y los ciudadanos relegados a elegir entre burro pardo o burro blanco. Es decir, a elegir entre burros de distinto color.
Y ahí tenemos al PSOE, que predica el reconocimiento de principios como el Estado Social como algo progresivo o al menos como una cuestión irrenunciable actuando como un frente, ante las actuaciones regresivas del poder. ¡Pues no! De la mano de Zapatero ha pasado a realizar retrocesos arbitrarios dando de lado a las conquistas adquiridas. Y ahí tenemos a los tíos, sacando pecho. Pero no me extraña, los únicos que han sido atacados desde todos los estamentos, son precisamente los más perjudicados, los asalariados.

TE PISÉ: ¡PERDONA Y AGUÁNTATE!

PENSIONES II (¿Públicas o Privadas?)

Hoy deseo comenzar haciendo referencia a Van Rensselaer Potter , quien utiliza _ al inicio de los años 70 del siglo XX _ por primera ...